Agua como inversión

Junto con la electricidad, el agua puede considerarse el bien más importante de que disponemos: y desgraciadamente tenemos muy poca. Aproximadamente el 70% de la superficie terrestre está cubierta de agua, pero más del 97% es agua salada. El agua salada no puede utilizarse para beber, regar cultivos ni para la mayoría de los usos industriales. Del 3% restante de los recursos hídricos mundiales, sólo un 1% está disponible para el consumo humano.

El agua y la electricidad no sólo son bienes importantes para la producción, sino para la vida misma. Sin embargo, el propio uso del agua como mercancía para fines industriales y agrícolas ha provocado una preocupante escasez de este preciado recurso. China, Egipto, India, Israel, Pakistán, México, la mayor parte de África y Estados Unidos (Arizona, Nuevo México, California y el oeste de Texas) son zonas que han experimentado una escasez de agua dulce utilizable.

La contaminación es otra causa de la escasez de agua, porque las reservas de agua sucia limitan aún más la cantidad de agua dulce disponible para uso humano. Así pues, si la mercancía de la que hablamos son reservas utilizables de agua dulce que sólo representan el 1% de todas las reservas de agua del planeta, podemos preguntarnos si no valdría la pena reutilizar esta agua escasa: y el agua reutilizada se convertiría entonces en una mercancía aún más valiosa. Sin embargo, para abrir un mercado como éste -totalmente nuevo e innovador- necesitaríamos instrumentos de incentivo similares a los certificados verdes (declinados en sus diversas formas, desde los créditos de carbono hasta los GO/RECS) utilizados para limpiar el aire de gases de efecto invernadero. Estamos pensando en una especie de certificados azules que recompensarían a quienes no desperdician ni reutilizan el agua dulce. Como en el caso de los certificados verdes, puede haber mercados voluntarios y obligatorios. Sin embargo, este tipo de instrumentos aún no existen a gran escala (salvo algunas excepciones con soluciones interesantes e innovadoras). La única forma estructurada -que al menos conozcamos- de invertir en el agua como materia prima son actualmente los futuros del índice Nasdaq Veles California Water (véase el gráfico siguiente).

El índice (NQH2O) es calculado por WestWater Research a través de Waterlitix™, la mayor y más completa fuente de precios de transacciones de agua en California, y pretende -primer caso en el mundo- hacer un seguimiento del precio spot del agua en el estado californiano.

Sus principales características son:

– valor expresado en dólares estadounidenses por acre-pie ($/AF) en origen, excluidos los costes de transporte y las pérdidas (un AF equivale a 325.851 galones, o aproximadamente 1233 metros cúbicos de agua)
– se calcula y difunde una vez a la semana, tras el cierre de las actividades comerciales, los miércoles, y representa todos los datos hasta el final de la semana anterior;
– representa la media ponderada por volumen de los precios del agua y muestra el nivel actual de los precios del agua en California, determinado por las transacciones de derechos de agua de cinco mercados de agua:

    •              – Aguas superficiales
    •              – Cuenca Central
    •              – Cuenca de Chino
    •              – Cuenca principal
    •              – Cuenca del Mojave – Subzona superior

– refleja los cambios en la escasez relativa de agua en California;
– WestWater es el proveedor exclusivo de datos que alimenta el Índice.

El valor de WestWater viene expresado por su base de datos patentada de ventas y arrendamientos de derechos de agua durante las dos últimas décadas. Con más de 30.000 transacciones archivadas, Waterlitix™ mantiene información detallada sobre precios, cantidades y otros términos de las transacciones, verificada mediante entrevistas con las partes interesadas y confirmada por documentos de archivo.

El futuro, que también tiene este índice como subyacente, es emitido por el NASDAQ a vencimiento trimestral y cotiza a 10 puntos de índice por contrato con liquidación en efectivo. Esta solución de inversión, aunque atractiva, tiene sus inconvenientes. Normalmente, un futuro sobre materias primas requiere altos niveles de estandarización, por ejemplo en las características del subyacente, que a menudo tiene un mercado «físico» al contado. En el caso del agua, esta normalización corre el riesgo de no presentar las características adecuadas para un futuro global, ya que un acro-pie tiene especificidades diferentes según la zona donde se produzca y utilice. Existe por tanto el riesgo de producir futuros diferentes según la zona donde «resida» el agua, lo que no es realmente una característica deseable para este tipo de instrumento. Por eso creemos que la mejor forma de invertir en el agua como mercancía es con el modelo de certificados.

Aparte de este instrumento, es muy complejo invertir en el agua como mercancía. En la actualidad, existen principalmente fondos tanto pasivos como activos que invierten en acciones de empresas que cotizan en bolsa y se dedican a diversos temas relacionados con el agua. Se dividen principalmente en dos categorías: servicios e infraestructuras relacionados con el agua y equipos y materiales relacionados con el agua. Dentro de estas categorías encontramos empresas dedicadas a prestar servicios de distribución, servicios de filtración y tecnologías de flujo, entre las principales. Más concretamente, entre las empresas en las que invertir para obtener beneficios de las actividades relacionadas con el agua se encuentran los proveedores de bebidas, los servicios públicos, las empresas de tratamiento/conservación y purificación del agua y los fabricantes de equipos, como los que suministran bombas, válvulas y unidades de desalinización. En concreto, según un estudio de las Naciones Unidas de 2018, 177 países dependen de la desalinización para satisfacer al menos parte de sus necesidades de agua dulce. Las empresas que fabrican equipos y ofrecen servicios en este ámbito son candidatas obvias a entrar en la cartera de estos fondos.

Aparte de la inversión en empresas especializadas en el tratamiento de este material vital y los servicios relacionados, todavía estamos en un mercado inmaduro en lo que respecta al agua como mercancía. Por lo tanto, podemos esperar un desarrollo significativo en los próximos años en este frente también porque -volviendo a uno de nuestros posts anteriores- conocemos oportunidades de inversión relacionadas con los cánones sobre el agua, lo que indica que nos estamos moviendo en varias direcciones para hacer de este tema de inversión una oportunidad no desdeñable para los próximos años que esperamos logre combinar las razones de rentabilidad con las de sostenibilidad.

Descargo de responsabilidad

Este post expresa la opinión personal de los empleados de Custodia Wealth Management que lo han escrito. No constituye asesoramiento ni recomendaciones de inversión, ni debe considerarse una invitación a operar con instrumentos financieros.